viernes, 21 de marzo de 2014

XVIII - La vieja compañera

Oh amiga mía, gran y poderoso asidero
sin despegarte de mi cuerpo, dame que sueñe
mi vida, mi tiempo, mi futuro, mi dinero
todo es tuyo, siempre que tu hálito me acompañe.

No quiero viajes, no quiero ver mundo
https://www.youtube.com/watch?v=sEqgZFrWfoM

no tengo apenas deseo alguno de vivir
muestra pura de mi sueldo y pecunio
no quiero oír, ver, ni existir.

Ciegame con sueños ilusorios
hazme persona de sonrisa falaz
pues el mundo me da asco
no necesito ver la realidad.

El tiempo es una rueda desgastada
el oxido humano es un portento
me da igual cualquier deber
solo con tenerte en todo momento
el resto se pueden joder.

Oh amiga mía, cuan daño me haces
pintaste vana sonrisa en mis labios
y ya no se donde encontrarme
aunque me buscase a diario.

Oh amiga mía, ¿por qué no podré dejarte?

Te venderás a todos,
mas yo te quiero para mi,
aunque me cueste todo el oro
sin ti, olvidé como vivir.

No quiero buenas compañías,
ni he de aprender mas
si he de dejarte, será muerto.
Sacadme entonces, por la puerta de atrás...




Raiben

jueves, 6 de marzo de 2014

XVII - La petite mort

Al principio cual semilla, tienes una avidez por el conocimiento, tienes ideas fulgurantes que crecen dentro y mueren por salir fuera de ti.
Te transformas en un tallo cuya única dirección, ir hacia adelante, te permite desarrollarte fácil aunque débilmente y desarrollarte.
En esa maravillosa época dibujas, corres, ríes, juegas, y (como no) te permites ver la vida color de rosa.
Pero poco a poco, van creciéndote nuevas ramas, nuevas hojas, nuevas preocupaciones.
Ese débil y flexible tallo, a base de resistir lluvia viento y tormentas, va endureciéndose, volviéndose rígido.

Aun recuerdo esa vida color de rosa ya que, aunque amaneció temprana, siempre he gozado de buena memoria. Recuerdo las ilusiones, la piel erizada, ese barboteo estomagil que no te abandonaba ni aun en la hora de dormir.

http://www.youtube.com/watch?v=DDjlaN-X8-0
Y las ideas, oh las ideas, planes, ilusiones, alegrías...
Toda una ristra de imágenes y cuadros sin pintar,
todo un holliwood de películas sin terminar.
Ideas que quedaron para siempre en el tintero.

Una vez ese tronco se endurece, una vez te fortaleces contra el viento.
Ya no hay sueño que emane, ni rocío en la mañana que cree una bonita foto.
La vida se torna una via de tren, en un solo sentido; el de seguir adelante.
Las ramas, ya crecidas, no dejan sitio a la imaginación.
Ya no hay Romeos y Julietas, ya no hay héroes y princesas
ya no quedan gestas, torneos, inspiraciones de poemas.

Los juegos acaban pronto, pero no las ganas de jugar.
Pero el mundo se va volviendo monocromo, y hay muchas raíces que vigilar.

Los carpe diem, siempre vanos y vacuos, son unos pseudo-Peter Pan cuyo disfrute les ha de crear una mas poderosa y eterna resaca.

En ese tipo de vida... ¿qué buscarán?

Leí hace tiempo que el tabaco endurece el sistema sanguíneo, quizás sea esa la explicación de tal rudeza.
Un rigor mortis cardiovascular en vida costeado a base de los envites del oleaje.
Siempre me creí tortuga, valiente de mi lanzándome al mar creyendo que el tenue caparazón me protegería.

Pero son las mismas corrientes que uno busca, los que acaban endureciendo ese caparazón, hasta niveles que ni uno mismo buscaba.

Pero la vida es así, un no parar, siempre hacia delante...

¿Será por eso que me cuesta tanto crecer por dentro?
¿Por qué si no, será?




Raiben

miércoles, 5 de marzo de 2014

XVI - Sueños del pasado.

Aquí me hallo hoy día, perdido en una Jungla de cristal, de luces y sombras.
Me fuerzo a escribir palabras que ya no llegan, por la falta de costumbre (un año ha casi)
y es que, melancolías, alegrías y tristezas ya no vienen cual picos de LSD y en oleadas.
Si no breves y fatuas cual toque de sal en la comida.

Leí un dicho (váyase a saber si de Da Vinci "el pintamonas") que diziese asi mesmo:

"La inteligencia, así como las habilidades y dones se pierden sin un continuo uso y practica" 

Así que heme aquí, pro fortuna, por temor o bien por nostalgia y sin esas musas palabroides que en tanto me acompasaban en esas madrugadas largas. (Pues las madrugadas siguen ahí, que no las ideas)
¿Como estáis, que es de vuestra vida? A veces me pregunto.

http://www.youtube.com/watch?v=CjOv25iFJfk
Cuando no son los muertos lo que reviven en mis sueños d'alguna u otra manera. Son consejos vanos o visiones negrunas del futuro (que las tengo, váyanse ustedes a creer que deliro - aunque por otra parte quizás - )

Soñé muchas cosas, motivadas por mis vicios o miedo. Pues la mente siempre ha sido así, puñetera.

Soñé con los que ya no están, pues parece ser que se niegan a irse del todo.

Soñé quedarme infante, y ver como todo lo que me rodeaba crecía y me dejaba atrás. (De esto hará ya unos 15 o 16 años, figúrate el miedo que me ha dado tal sueño)

Soñé con eternas caídas
Soñé con largos viajes
Soñé raudas estampidas
Soñe con viejos amigos
Hasta por soñar,
fíjate que en alguna ocasión 
por desecho viejo de pasión
¡hasta soñé contigo!

Y me repito hasta la saciedad "tienes que cambiar, tienes que hacerlo ya"
Pues como siempre digo y comparo, la arena del tiempo ni se detiene, ni va hacia arriba.
Aunque nos empeñemos en seguir viviendo como antaño, que como dice mi mare
"De ilusiones no se come"

Una batalla diría yo, entre ego y superego, quizás entre mi yo con una barba cada vez mas rala, y ese niño cabezón de ricitos y mirada inquisidora cuya eterna pregunta era "¿Por qué?"
No se que resultaría peor, si viajar al pasado y que me viesen como soy hoy, desecho de ilusiones mías y puestas en mi. 

¿O tal vez el futuro.... negro futuro que a todos nos espera?

¿Que será de la vasca extravagante? ¿De la londinense brincante? ¿Del canario paternal? ¿Del gaditano en tierra extraña? ¿De la soñadora granaina? ¿Del amigo de sudor porro y espina?
¿Del compañero de fatigas?

Todos esos caminos, que un día compartieron tallo conmigo, se han enraizado por la tierra oscura, en mil reveses y fortunas y ya ni les veo.

Y esos 3 pelos de barba que antaño quisiere, 
tornanse ya maldición recordatoria,
de mirada ampliamente acusatoria.
Ante el calvario que espera
a aquel que el cambio no buscare.

Solo la música acompaña ¡oh gran compañera! los recuerdos del viejo flautista, del piano rojo, de esos juegos de villanos entre rastrojos.

Y mientras, la vida fluye.








Raiben