el camino en el bosque,
la brújula que te guía en la niebla.
Eso es perder el amor.
Ver marchitarse ante tus ojos
los prados verdes y vivaces,
ver morir las plantas e ilusiones
que tu mismo creaste.
Es una tortura sin duda.
Ninguna canción te consuela,
tan solo amargo trago recuerda;
los silencios vedados,
quedan ahora en la espera.
¿Que será de nosotros, nena?
Ni los mapas ni estrellas,
saben guiarme ahora en mi camino.
Es un duro desatino,
ver pasar el día a día
sin alegría ni destino.
Es una tortura sin duda
Caminante no hay camino
se hace camino al andar
mas si no hay nadie contigo
la ruta lo mismo no será.
¿Qué será de mi?
Es una tortura, el saberlo.
Raiben